Bajo la categoría clean web design se agrupan los sitios web que utilizan los espacios vacíos como recurso estético y para una mejor organización de la información. La presencia de espacios en blanco implica, naturalmente, el uso de pocos elementos separados entre sí, característica central del diseño web minimalista. Sin embargo, hay quienes insisten en separar estas categorías: un diseño minimalista es necesariamente simple, mientras que un diseño clean (limpio) puede ser complejo incluso en su economía de elementos. Para otros, en cambio, un sitio puede tener muchos elementos y aun así conservar una estética limpia. De acuerdo con el sitio web de los premios Awwwards (que recopila muchos ejemplos de diseño clean), «mientras el diseño minimalista consiste en usar sólo los elementos esenciales en el diseño de un sitio web y hacer más con menos, el diseño clean tiene que ver más con colocar cada elemento exactamente donde se necesita».
¿Cuáles son las ventajas de este tipo de diseño?
- Más fácil de navegar. Los botones de navegación son sólo los esenciales y no están amontonados en un mismo rincón de la página, otorgando claridad.
- Menor tiempo de carga. Si elegimos usar pocos elementos, naturalmente el tiempo de carga de cada página será menor. Recordemos que acelerar la carga es importante para una buena experiencia de usuario.
- Contenido más fácil de «escanear». Los usuarios no tienden a leer cada palabra de una página, sino a «escanear» su contenido por encima de arriba abajo. Una buena organización de los bloques de texto ayuda a que ese escaneo sea más fácil.
- Más fácil de rastrear. Para los spiders de los buscadores es más fácil analizar el contenido de un sitio web despojado.
Diseñar sitios web clean puede resultar más rápido y sencillo que llenar un sitio web de imágenes o texto. Si a eso se suman los beneficios ya mencionados, es evidente que se trata de una opción a considerar a la hora de afrontar diferentes tipos de proyectos, como sitios web institucionales y portfolios.