Aunque las estadísticas al respecto recogidas en nuestro país difieren, es innegable que el tráfico de Internet a través de dispositivos móviles se encuentra en pleno crecimiento. Hacer que nuestro sitio web sea responsivo, desarrollar una versión móvil y ofrecer una aplicación para iOS y Android son opciones entre las que necesariamente debemos elegir: la alternativa es negarles a los usuarios de smartphones o tablets una experiencia de navegación satisfactoria. Pero no solo se trata de ajustar los contenidos a pantallas más chicas: hay que cubrir las necesidades de usabilidad particulares que imponen estos dispositivos.

1. Menús inteligentes. En dispositivos móviles, el menú de navegación sólo debe mostrar los enlaces esenciales, incluso aunque esto implique ocultar algunos enlaces visibles en escritorio. Si el menú es desplegable, la lista de segundo nivel debe aparecer necesariamente ante el «toque» (equivalente a un clic), ya que la acción de pasar el cursor sobre un título no existe en dispositivos táctiles.
2. Enlaces adecuados. Cada enlace debe tener el grosor necesario como para contener el diámetro del dedo (aproximadamente, 44 píxeles). Alrededor de él debe dejarse suficiente espacio vacío como para que el usuario no lo presione accidentalmente.
3. El contenido importante, arriba. Dada la limitación del espacio, debemos optimizarlo mejor. El contenido que queremos asegurarnos de visibilizar debe quedar al tope de la página, mientras que el contenido menos importante debe quedar abajo.
4. Dar opciones. Es altamente probable que el sitio para móviles contenga menos elementos. Por eso, no está de más ofrecer un enlace para acceder a la versión completa (la de escritorio) desde el dispositivo móvil, para aquellos que creen estar perdiéndose de algo.
5. Evitar el ingreso de texto. Suele ser muy incómodo escribir en un smartphone. Por eso, los métodos de entrada basados en escritura deben, siempre que sea posible, reemplazarse por menús de opciones, checkboxes y radio buttons.
6. Reducir las imágenes. Solo deberían utilizarse las imágenes necesarias, de tamaño reducido y con el peso comprimido, para no sobreexigir las lentas conexiones móviles.

Siguiendo estos consejos evitaremos a los usuarios de móviles las frustraciones habituales al presionar enlaces accidentalmente, ingresar opciones equivocadas o no encontrar lo que buscan en la página.