La mayoría de los sitios web que visitamos a diario tienen una página de contacto, que nos ofrece una serie de medios para comunicarnos con la empresa. Una dirección de email, un formulario para escribir y enviar el mensaje, un número de teléfono y una dirección (con su correspondiente ubicación en Google Maps) son algunos de los recursos que podemos encontrar. A pesar del avance de las redes sociales, estas vías de comunicación tradicionales siguen siendo importantes por su privacidad y su comodidad. Por eso, muchas veces la sección de contacto es tan esencial como la misma homepage. Para optimizarla al máximo, hoy ofrecemos estos consejos.

• Buena ubicación. El link a la sección de contacto debe ser fácil de encontrar. Dos lugares habituales son el menú superior (como último elemento de la lista de enlaces) y el footer. En algunos sitios, el enlace aparece incluso destacado con otro color.
• Pedir la menor cantidad de datos posible. El formulario de contacto debe tener la menor cantidad de campos posible. Lo ideal es entre dos y cinco, correspondiendo dos de ellos al email del remitente y al cuerpo del mensaje. Como ya comentamos, mientras más campos tenga un formulario, menos inclinado se verá el usuario a completarlo. Pero no es solo un tema de cantidad: según un estudio de Dan Zarrella, solicitar el teléfono, la edad o la dirección reduce considerablemente las tasas de conversión. El desafío es determinar qué datos son realmente indispensables para que el usuario se comunique con nosotros.
• Aportar la mayor cantidad de datos posible. A diferencia del usuario, nosotros sí debemos aportar todos los datos de contacto que podamos. Si bien esta asimetría puede parecer injusta, es la única manera de generar confianza hacia nuestra empresa. Si se cuenta con oficinas propias, aportar una dirección (aunque sea aproximada) brinda una buena impresión.
• Ofrecer una dirección de correo electrónico. Lo ideal es ofrecer una dirección de email y, al mismo tiempo, un formulario que permita enviar mensajes a esa casilla desde la misma página. De esta manera, el usuario puede elegir entre la seguridad de usar su propia plataforma de email (como Gmail, Yahoo!, etc.) y enviar el mensaje por un medio más directo. Si la dirección está correctamente enlazada, al hacer clic sobre ella el usuario accederá automáticamente a su servicio de email, listo para redactar el mensaje (en el caso en que lo haya configurado para tal fin).

Aplicando estas medidas haremos que nuestra página de contacto sea más atractiva para el usuario, invitándolo a comunicarse con nosotros para conocer más sobre la propuesta de nuestra empresa.