En artículos previos hablamos sobre la accesibilidad, la usabilidad y la experiencia de usuario en relación con el diseño de sitios web. Definitivamente, la facilidad con que podemos navegar por un sitio web, la medida en que éste nos permite alcanzar nuestros objetivos a través de su uso y el efecto psicológico que nos causa son factores importantes a la hora de desarrollar cualquier proyecto para la Red. Y todos ellos se ven influenciados por un concepto fundamental: la arquitectura de la información.

El Information Architecture Institute define a esta disciplina como «el arte y la ciencia de organizar y etiquetar sitios web, intranets, comunidades online y software para promover la usabilidad». Sin embargo, como suele suceder, el término suele aceptar otros significados.  En general, se dice que la arquitectura de información incluye el desarrollo y la aplicación de modelos de clasificación, estructuración y acceso a la información para que los usuarios puedan utilizar y aprovechar los contenidos de un sitio web con facilidad.

La forma en que se estructura una base de datos, por ejemplo, es una atribución de esta disciplina. Otras de sus áreas de influencia son los sistemas de bibliotecas, los sistemas de gestión de contenidos, el desarrollo web, la interacción usuario-máquina, la programación, la escritura de textos técnicos, la arquitectura empresarial y el diseño de sistemas de software críticos.

Como puede verse, la arquitectura de información no abarca solo a los sistemas computacionales, sino que es propia de los sistemas de información en general. Sin embargo, como en la actualidad la mayoría de los sistemas de información funcionan sobre software, es en esta área donde la arquitectura de información ejerce mayor influencia. Y particularmente, en el desarrollo de sitios web, ya que la facilidad con que los usuarios pueden encontrar, leer y procesar la información que necesitan extraer de nuestra web tiene una importancia vital en su percepción final sobre ella.