Los banners nos acompañan desde los inicios de la Web, y aún hoy, dos décadas después, siguen constituyendo una de las piezas más importantes del marketing online. Pero, con el paso del tiempo, el desarrollo de la tecnología y el crecimiento de las conexiones de banda ancha permitieron dotarlos de nuevos elementos que fueron enriqueciendo su valor publicitario y, por qué no, artístico. Así nacieron los banners rich media.

Un banner tradicional es una imagen, estática o con escasos efectos de animación, sobre la cual un usuario hace clic para ir a otro sitio web. Un banner rich media es una pieza interactiva, generalmente desarrollada en Adobe Flash o JavaScript, que presenta audio o video de alta calidad y que ofrece distintos comportamientos además de funcionar como enlace externo.

Los banners rich media nacieron en 1996, cuando Hewlett-Packard incorporó en uno de sus anuncios una versión de tamaño reducido del juego Pong, de Atari. El banner fue un éxito (el sitio de la compañía cuadruplicó su tráfico), pero era demasiado exigente para las plataformas de entonces.

Con el aumento de la capacidad de procesamiento de las computadoras y la velocidad de conexión a Internet, los banners rich media se hicieron más populares. Actualmente, son muy habituales los banners basados en spots publicitarios que el usuario puede reproducir o pausar a voluntad. También son comunes los juegos y las trivias, que nos llevan al sitio web una vez que terminamos la partida. Otros aumentan de tamaño cuando pasamos el cursor sobre ellos, mostrando alguna animación que nos brinde detalles sobre la propuesta.

Siempre que no se abuse de técnicas invasivas, los banners rich media funcionan mejor que los tradicionales, ya que motivan al usuario a dedicar un instante de tiempo considerable a leer las propuestas de nuestra marca sin salir del sitio donde está. Además, permiten a los desarrolladores registrar el tiempo que los usuarios pasan viendo la animación o el video, por qué zonas del banner pasan el cursor, cuántas veces reprodujeron la secuencia y si terminaron cliqueando sobre el enlace a nuestro sitio web, entre otros datos. Definitivamente, pueden aportar mucho a cualquier campaña publicitaria en la Red.