11/05/2016
Imágenes de stock: ¿una buena opción para ilustrar nuestro sitio web?
Los servicios de imágenes de stock (stock photography) nos proveen fotografías e ilustraciones aptas para todo tipo de usos. Son bancos que contienen de miles a millones de imágenes listas para ilustrar una enorme variedad de artículos, noticias y otros textos, o bien para ser usadas como elemento de diseño. Diversas fuentes ubican su origen en la década de 1920, cuando H. Armstrong Roberts fundó la agencia de fotografía RobertStock, destinada mayormente a los periódicos en papel. Sin embargo, el sistema recién cobró verdadera importancia en los años 80, cuando muchos fotógrafos descubrieron que vender imágenes para publicidades podía resultar una ocupación más placentera y lucrativa que trabajar por encargo. La actividad se profesionalizó, adaptándose a necesidades temáticas y funcionales cada vez más específicas, y a una creciente variedad de usos. A principios de los 90, aparecieron empresas que vendían CD-ROM con imágenes. Actualmente, los bancos de imágenes funcionan a través de la Web (en sitios como Getty Images y Shutterstock) y sirven mayormente a blogs y sitios de noticias, aunque también son empleados en publicaciones impresas y piezas audiovisuales, entre otros medios.
Las imágenes se venden a distintos precios, y bajo distintas restricciones de uso. Es un modelo de negocio que funciona porque su premisa es atractiva: conseguir las imágenes que necesitamos sin necesidad de contratar fotógrafos o dibujantes profesionales para tal fin, lo cual implicaría una mayor inversión de tiempo y de dinero. Sin embargo, la fotografía de stock tiene tantas ventajas como desventajas.
Ventajas
- Tiempo y costos. En general, contratar a un fotógrafo o a un ilustrador es más caro que comprar una imagen de stock. Además, conseguir al profesional indicado puede llevarnos un buen tiempo. Y a la hora de tomar una fotografía pueden aparecer inconvenientes no tenidos en cuenta previamente, como una lluvia repentina o dificultades para conseguir locaciones, que demoren el encargo.
- Seguridad. Antes de comprar una imagen de stock podemos verla con cierto detalle. En cambio, al encargar una imagen personalizada no podemos estar seguros de si el resultado final será satisfactorio.
- Variedad. Ser usuario de un banco de imágenes es especialmente útil si necesitaremos muchas ilustraciones para una gran variedad de contextos. Por ejemplo, esto podría ocurrir si gestionamos una red de blogs, con distintas temáticas, que se actualizan frecuentemente. Conseguir semanalmente ilustraciones de calidad para artículos de viajes, negocios y salud puede ser extremadamente costoso a menos que utilicemos bancos de imágenes, donde encontraremos piezas gráficas para todo tipo de temáticas. Si bien podemos conseguir imágenes gratuitamente en Google, es muy probable que estas no se adapten exactamente a lo que queremos o estén protegidas por derechos de autor.
Desventajas
- Falta de personalidad. Por mucha especificidad que intenten alcanzar, las imágenes de stock suelen tener un aspecto genérico. Son habituales los chistes sobre los clichés de las fotografías de stock, como el apretón de manos entre dos ejecutivos o el «empleado inspirado» haciendo anotaciones sobre un pizarrón transparente. Cuando se animan a una mayor creatividad, las imágenes de stock pueden ser directamente ridículas, como lo demuestra la hilarante colección Awkward Stock Photos.
- Poca confiabilidad. Ciertas fotografías de stock pueden minar por completo la confianza que pueda transmitir nuestra organización. Esto suele ocurrir con las fotografías de supuestos profesionales. Por ejemplo, muchos sitios web de clínicas usan imágenes genéricas de médicos sonriendo, sin advertir que los modelos presentados suelen aparecer «ejerciendo» otras profesiones a lo largo y a lo ancho de la Red. En este tipo de casos (también habitual en sitios web de contadores y abogados), el usuario se sentirá engañado al no poder hallar un rostro real que represente a la organización. En cambio, imágenes de paisajes, animales o personajes famosos no serán observadas con tanta atención. Ver también: Cómo lograr que los usuarios confíen en nuestro sitio web.
- Falta de originalidad. Como las imágenes de stock pueden ser compradas por cualquier persona, es probable que la imagen que elijamos ya esté siendo utilizada en otra parte, lo cual atenta contra la originalidad de nuestro sitio web.
- Restricciones. Las imágenes de stock se venden bajo ciertas restricciones de uso. Al encargar la realización de imágenes personalizadas, en cambio, podremos acordar sus derechos de reproducción con el fotógrafo o ilustrador.
Conclusión
Las imágenes de stock tienen importantes ventajas, pero nunca ofrecerán resultados tan satisfactorios como un trabajo personalizado a cargo de un artista competente que comprenda nuestras necesidades. Sin embargo, las imágenes de stock pueden ser convenientes cuando debemos priorizar la cantidad por sobre la calidad, y son la mejor opción en ciertos contextos particulares; por ejemplo, cuando estamos diseñando un sitio web y todavía no contamos con los assets definitivos.
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